Audiencias

Esta palabra invita a pensar. De forma casi intuitiva sugiere los análisis de audiencias, una cierta espada de Damocles, algo que controla la permanencia en antena de los programas de la radio o la televisión. Son estudios que permiten conocer el número de personas que se acercan, de una forma u otra, a un producto audiovisual. Las cadenas luchan por ellas si quieren sobrevivir. Otras veces, sin embargo, se ignoran o parecen algo casi misterioso. Por ejemplo, a los niños y niñas de 3 o 4 años que comienzan a acercarse a Internet a través del móvil o el ordenador, sobre todo cuando juegan en la red, les resulta difícil pensar que más allá de un teléfono o una consola hay otra persona a la que no ven, pero con la que están interactuando a través de su pantalla. Se observa, por ejemplo, cuando juegan con los pingüinos que ofrece Disney en el Club Pinguin, un juego on line popular a esa edad.

La audiencia es también algo difícil de tener en cuenta cuando se generan mensajes que parecen no tener destinatario, por ejemplo cuando los pequeños rellenan fichas escolares que quizás nunca se leerán, a pesar de todo lo que ha costado escribirlas. El único destinatario de estos textos es el profesor o la profesora, aunque el autor olvide que se dirige a alguien; podemos recordar, por ejemplo, cualquier situación en la que se rellenan las famosas fichas haciendo los deberes, un tema polémico sin duda.

Interacción con los medios

Recientemente, he releído diversos trabajos de Sonia Livingston, que ayudan a entender las relaciones entre ejemplos tan dispares como los anteriores. Nos sitúan ante la idea de audiencia, entendida como una forma de interacción que las personas mantienen con los medios. Esa relación puede comprenderse desde perspectivas muy distintas. Ha sido uno de los temas recurrentes de esta autora en la London School of Economics, utilizando indistintamente metodologías cuantitativas y cualitativas; es ello, quizás, lo que enriquece su trabajo ante este tema, lo que le permite entenderlo desde muchos puntos de vista. Las audiencias infantiles son una población específica, que hay que tener en cuenta, un buen ejemplo es incluso su presencia en la comunidad de música clásica, algo que a veces se olvida.

Alfabetización

Podemos profundizar en la cuestión a través de uno de sus artículos, excelente e innovador por sus ideas, ya antiguo por el momento en que se publicó (2008), Engaging with media – a matter of literacy? Como vemos, desde comienzo se hace una pregunta: ¿Hasta qué punto la interacción con los medios de comunicación es un asunto de personas alfabetizadas? O lo que es lo mismo: ¿Qué relación existe entre lo que suele llamarse alfabetización, esto es, comprender y reflexionar desde un texto escrito o audiovisual, y el concepto de audiencia? Sus ideas permiten entender el término audiencia estableciendo relaciones en líneas que, aparentemente, están muy distantes. Por ejemplo, los trabajos más clásicos realizados sobre las posibles audiencias de la publicidad, y los que en ámbitos relacionados con la educación han querido educar a personas para que también sean poderosas cuando responden críticamente al poder de los medios. Una combinación de estas perspectivas aparece en un libro reciente del que es editora, Meanings of Audiences. Comparative Discourses.

Actitudes críticas

Leyendo a Sonia Livingston se comprende que es necesaria una educación de la audiencia desde una perspectiva interdisciplinar. No se es una persona alfabetizada por saber pasar con el dedo las pantallas de una tableta o de un móvil, del mismo modo que no se comprende el mensaje de un libro si solo pasamos las páginas sin fijar la vista y la mente en ellas. A veces se ha criticado el hecho de que la educación se preocupe por formar audiencias críticas. Hay quienes piensan que se trata de una actitud demasiado proteccionista, ante la gente normal y ante los más jóvenes. Seguramente, lo difícil es comprender en qué ha de consistir esa educación. Relacionar audiencias, en su sentido más clásico en el ámbito de los medios de comunicación, y alfabetización, un término frecuente en educación, es un camino.

Sonia Livingston, en la aportación reciente que muestra el vídeo, se refiere a los jóvenes en cuanto que son audiencias activas que participan en las redes sociales. Es una ejemplo  de cómo pude plantearse en la actualidad la formación de audiencias alfabetizadas ante los nuevos medios.